Panel de cocina a medida en inox

¿Frente de cocina o panel antisalpicaduras?

Seguramente cuando buscabas este revestimiento en acero inoxidable, no sabías cómo denominarlo.  Existen varios términos para calificar lo que en realidad es una placa en acero inoxidable satinado que te servirá como revestimiento de una pared para decorarla y protegerla.  Algunos términos son: frente de cocina, frontal de cocina, panel antisalpicaduras, revestimiento de pared, panel de cocina, placa protectora de pared, etc.

Usos de un frente de cocina

El uso más corriente de este revestimiento es para proteger la pared situada trás la placa de cocción o del fregadero.  Te proponemos esta pieza en inox satinado ya que es mucho más estético y moderno. El acero inoxidable es un metal perfectamente adaptado a la cocina ya que resiste al calor, a la humedad y se limpia fácilmente.  Además es un acero inoxidable alimentario por lo que puede estar en contacto con los alimentos. A continuación te ponemos un enlace sobre nuestro articulo de blog donde te mostramos varios frentes de cocina en acero inoxidable.

Instalación de un frente de cocina

Primero identifica la cara satinada que está protegida por una capa plástica.  Puedes levantar una esquinita del plástico y verás la diferencia entre la cara satinada y la bruta.  La cara bruta puede tener rayaduras o impactos debido a los procesos de corte y manipulación, pero no es grave ya que no se verá.  Para fijar tu placa en la pared extiende el pegamento en la cara bruta que no está protegida por el film plástico.  Mantén la presión de manera uniforme hasta que la placa se adhiera al soporte (pared, puerta...). Te aconsejamos conservar hasta el final la capa plástica y retirarla sólamente cuando hayas terminado su instalación.  Para facilitar la limpieza, podrás poner una junta entre tu encimera y el frente de cocción. 

Consejos y limpieza

Ten cuidado con los bordes de tu placa ya que no están biselados.  Utiliza guantes de protección antes de manipularla.  Para el mantenimiento usa una esponja y jabón líquido para la vajilla.  No utilices productos de limpieza agresivos que contengan cloros, sales, ácidos o lejia ni tampoco estropajos ya que dañarían tu placa.